No sabía que necesitaba un abrazo, fue lo que pensé al salir del Centro Cultural ubicado en el Casco Histórico de la ciudad, todavía impregnada de la gran emoción sentida en la inauguración de una Asociación de Yoga, y agradeciendo la gran suerte al ser invitada.
Su creadora lleva años trabajando en diversos centros, impartiendo ésta filosofía con aires renovados.
Después de realizar diferentes ejercicios, danzas, guiados por varios integrantes de este proyecto, y sonrisa sostenida sin tener en cuenta las horas transcurridas, nos fundimos en un abrazo afectuoso, primero con la persona que teníamos cada una a su lado, y después el grupo en un círculo, todos unidos para contribuir con esa relajación que necesitamos y nuestra búsqueda de esa paz interior que puede durar meses, años o toda la vida.
A varias personas no las conocía de nada pero aún así nos despedimos con la certeza de que
“un simple abrazo nos enternece el corazón; nos da la bienvenida y nos hace más llevadera la vida”.
Los abrazos son una de las muestras más gratificantes del ser humano. No podría vivir sin un abrazo, los necesito como el respirar o el alimento.
“Me gustan los abrazos que aunque no resuelven nada, son un modo de decirle a la adversidad que no, que no va a poder con nosotros.”
Un abrazo nos ayuda a fortalecer la autoestima, aleja de nosotros la soledad, alivia las tensiones, nos hace más felices si ya lo somos y si estamos tristes nos ayuda a superar el malestar.
Hace ya tres años que no nos vemos, pero seguimos estando en contacto.
Un abrazo muy fuerte para mi amiga Beatriz de su amiga burgalesa.
Hola Carmen! Muy bonitas y emocionantes tus palabras, Muchas Gracias y un gran abrazo de corazón para ti también, saludos
¡Gracias querida amiga por compartir con todos, esa misma experiencia que un día vivimos todo el grupo, al lado y arropados por “La buena estrella de un motivador” tal y como tú muy bien parafraseas!.
Esos abrazos, que nunca deben faltar en nuestras vidas, sigan siendo la expresión del alma que nos une a todos y a todo ante el dolor y la falta de amor.
¡Sigue dándonos esos retazos del alma! Me gusta mucho como lo expresas
Con un fuerte abrazo, Clementina
Gracias Clementina, es verdad que todos estábamos bien arropados por una gran motivadora, que lleva años iluminándonos con su buena luz, muchos saludos